De vez en cuando, los accidentes de tránsito ocupan los encabezados de los medios de comunicación, en especial cuando participan unidades del transporte público de pasajeros.Esta semana en particular, llamó la atención un accidente ocurrido en el kilómetro 17 de la carretera Panamericana, en el tramo conocido como Los Chorros, donde un autobús de la ruta 205 impactó contra seis vehículos hasta detenerse en el separador central de la vía.
A raíz de ese incidente, comenzaron a fluir los comentarios de que la apertura temprana de la nueva autopista -realizada el 18 de abril- habría sido un factor que influye en la ocurrencia de percances.
Antes de que FOVIAL hiciera la reconstrucción de la vía en concreto hidráulico, la queja de los usuarios era el mal estado de la misma y que por esquivar baches era que ocurrían los accidentes viales.
Ahora la situación ha cambiado de versión: por el buen estado de la carretera es que los conductores aumentan la velocidad y se producen accidentes. A esto se le agrega que las labores en el tramo Los Chorros no han terminado y que los vehículos tienen que disminuir la velocidad.
En esta situación es cuando me pregunto: quién tiene la mayor responsabilidad de los accidentes viales, la carretera en buen estado o las personas que conducen los automóviles?
Pareciera ser que las personas que gustan de meter a fondo el acelerador no quieren tomar la responsabilidad que tienen en la seguridad vial, sino que siempre buscan a alguien -o algo, en este caso- a quien culpar.
Algunas veces he dicho que los funcionarios del Gobierno, en concreto del Viceministerio de Transporte, no van a ocupar el lugar de todos los conductores. Cada quien es responsable de cómo conduce.
Claro, eso no quita la responsabilidad de las autoridades competentes de instalar todos los dispositivos de seguridad vial para prevenir accidentes de tránsito.
El tramo de Los Chorros es parte de la carretera Panamericana, que debe tener estándares internacionales de señalización. No sé hasta dónde se puede regular la velocidad en la arteria.
Algo que comparto con algunos usuarios es que sería bueno que se instalaran reductores de velocidad antes de llegar a curvas pronunciadas.
Pero lo más importante, es que todos, absolutamente todos los automovilistas pongan de su parte y respeten los límites de velocidad establecidos.
Es preferible llegar unos minutos tarde al trabajo o a la casa, que llegar lesionado o nunca llegar.