Después de todo, la chicas de la familia Obama sí tuvieron la oportunidad de visitar uno de los parques arqueológicos de El Salvador, en el marco de la visita del presidente Barack Obama al país.
La señora Obama y sus hijas, pasaron una hora en el parque San Andrés, en el Kilómetro 32 carretera a Santa Ana, departamento de La Libertad.
Las distinguidas visitantes conocieron parte de la historia ancestral de San Andrés, que es una zona monumental de un centro ceremonial Maya del período Clásico Tardío (600-900 d.C.). Tiene una acrópolis, pirámides y otras estructuras.
San Andrés es uno de los centros prehispánicos más grandes de El Salvador. Esta antigua comunidad cubría más de 200 hectáreas y consistía en un centro monumental rodeado por una amplia zona residencial común.
Se cree que San Andrés llegó a señorear el valle de Zapotitán y algunas zonas vecinas, como el valle de las Hamacas donde se encuentra hoy San Salvador.
Las investigaciones indican la existencia de un pueblo agrícola desde quizás 900 años antes de Cristo hasta alrededor de 420 d.C., cuando la gigantesca erupción de Ilopango causó el abandono de la región.
La fertilidad del valle de Zapotitán pudo ser un factor por el que la zona fue bastante poblada. A cinco kilómetros de distancia se ubica el sitio Joya de Cerén, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Mientras las damas de la familia paseaban, el presidente Obama realizaba las últimas actividades programadas en su agenda de visita a tierras cuscatlecas.
Luego, salieron rumbo a la base militar en el aeropuerto de Comalapa, donde abordaron el Air Force One. La nave despegó a eso de las 11:05 de la mañana de este miércoles.
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