En el Parque Nacional Montecristo habita una impresionante riqueza natural. Se ha identificado, por lo menos 280 especies distintas de orquídeas, hay 73 especies de mamíferos como cotuzas, venados, pumas; también hay helechos gigantes, árboles de ciprés, pinos, en fin.
Y de acuerdo a algunos guarda recursos, en el casco de la hacienda San José Ingenio, que también forma parte del patrimonio cultural y natural, se han divisado algunas casampulgas.
Nunca las he visto, pero dicen que es una especie de araña que tiene la panza roja. Al parecer, su picada es mortal y, según la tradición oral sólo existe un remedio:
En los tiempos de antes, dice mi abuela, no había camionetas como hay ahora (autobuses), la gente se tenía que ir a pie, en carretas o caballos para ir a San Salvador y había veces que tenía que dormir en el monte.
Una de esas, cuentan que iban un grupo de gente y a un hombre le picó una casampulga. Mientras el pobre a quien le habia picado contaba los minutos que le quedaban de vida, otro dijo:
- hombre, para esto sólo un remedio hay.
El improvisado médico se fue detrás de un palo e hizo una "horchatilla de mierda" (así dice mi abuela, no sé si era de él o de alguien más) y se la dio al enfermo para que se la tomara.
Otro de los acompañantes se fijó de lo que estaba hecha y dijo:
- ¡Vee! si a mí me pica una desas mejor me muero, pero eso no me lo harto.
Bueno, el enfermo no se murió y siguieron su camino. Más adelante, le picó una al que había dicho que no se tomaba la horchata.
En su angustia de sentir cerca la muerte, exclamó:
- ¡Apúrense! ¡así nomás traiganme un cerote, que yo no me quiero morir!
Qué pasó después, mi abuela no sabe. Pero les aseguro que, hasta la fecha, nadie me ha desmentido esta versión.
Cuando vayan al campo ¡Cuidado con las casampulgas!
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