El año lectivo 2011 se inauguró en medio de un descontento del sector magisterial.Lo acepten o no, lo cierto es que los profesores del país estaban esperanzados en que el primer gobierno de izquierda del país les iba a mejorar su situación salarial.
Los educadores piden que se les incluya en el aumento salarial del 6% y 10% para el sector público prometido por el presidente Mauricio Funes.
Dicen que el art. 34 de la Ley de la Carrera Docente establece que son beneficiarios de los aumentos que haya, independientemente del escalafón que tienen.
Con ese argumento, decenas de maestros no se presentaron a laborar el primer día, sino que se fueron a protestar sobre la carretera Troncal del Norte y en la calle hacia Tonacatepeque, porque en el Centro Escolar Distrito Italia se haría la apertura oficial del año escolar.
Autoridades del Ministerio de Educación, dijeron que el año escolar inició con normalidad, pese a la protesta y la convoctaria de suspención de labores hecha por Bases Magisteriales.
Ambos sectores piden dialogar el tema, pero de antemano ponen sus condiciones: los profesores quieren aumento y el gobierno dice que no tiene recursos.
Parece que el tema será un estira y encoge.
Al final, ¿quiénes serán afectados?
Si el gobierno no da aumento a los profesores, los alumnos tendrán un año lectivo irregular porque sus maestros andarán en actividades de presión.
Si el gobierno les da el aumento, los afectados serás los padres de familia y población en general que es la que paga el sueldo del sector público con sus impuestos.
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