Aumenta demanda, pero no la capacidad

La Universidad de El Salvador (UES) realizó el pasado sábado 25 de octubre el examen de admisión para el año académico 2015, para el que se inscribieron 23,250 aspirantes. 
Este año vendieron 27,000 carpetas informativas para aspirantes a nuevo ingreso, que fueron 2,000 más que las vendidas el año pasado. Sin embargo, solo se admitieron cerca de 11,000 alumnos.
La población estudiantil para 2014 es de unos 55,000 alumnos. Las facultades que tienen mayor demanda son: Ciencias y Humanidades, Multidisciplinaria de Occidente, Medicina, Ciencias Económicas y la Multidisciplinaria de Oriente.

La cifra podría ser similar este año, pero eso depende de la capacidad que tenga cada facultad, comentó la vicerrectora Académica, Ana María Glower.

Considera que es positivo que los jóvenes tengan interés en estudios superiores y que quieran hacerlo en la UES; el problema radica en que no cuentan con la capacidad instalada para recibir esa cantidad de alumnos.

"No tenemos ni la infraestructura, ya sobrepasó, ni los docentes, no tenemos un presupuesto justo del cual pudiéramos decir que vamos a ampliar los cupos", expuso.

Agregó que desde hace varios años señalan que la UES tiene el presupuesto más bajo a nivel de las universidades públicas de Centroamérica y que eso no permite ampliar la capacidad. 
El año pasado, la casa de estudios enfrentón un déficit presupuestario para pagar los salarios, por lo que se vio obligada a pidir un refuerzo.

Desde la administración anterior, trabajan en el proyecto de una escuela de carretera técnicas y se espera que pueda comenzar a funcionar en el 2015.

Proceso

El proceso de admisión tiene tres etapas: 
Se admiten en la primera los que obtengan más de 50 puntos en la prueba de conocimiento.
Los que obtengan entre 30 y 49 pueden someterse a un examen específico que prepara cada facultad, siempre que tenga cupos disponibles.

La tercera es una etapa de reconsideración. Los resultados se entregarán en el mes de noviembre.

En años anteriores, gremios estudiantiles que funcionan al interior de la UES realizaron protestas para exigir ampliar los cupos, llegando incluso a cerrar las instalaciones por largo tiempo.

Imágenes del pasado

En blanco y negro, sepia, bien conservadas o con las huellas que deja el paso del tiempo; lo cierto es que muchos de nosotros conservamos alguna fotografía, una captura del tiempo pasado, de rostros con la mirada fija, sobrevivientes inmóviles del correr de los años.

Siempre me ha gustado ver las fotografías viejas de mi familia y saber más sobre esas personas. 

No sé específicamente desde cuándo me interesó conocer la vida de mi abuela y de mi madre, solo sé que escuché de buena gana sus anécdotas mientras pudieron contarlas.

Por medio de sus relatos siento que conocí bien a mi abuela Luisa, quien falleció cuando mi papá tenía como 13 años; a mi abuelo Julio, quien murió el año que mis padres se casaron; a mi tío Antonio, quien desapareció en diciembre de 1978 ó 1979 (no estoy segura cuál) y a la bisabuela Carmen, quien murió en 1990. 

Imaginaba cada historia y curiosamente todas (las graciosas, las tristes, las trágicas, las que se desarrollaron en Potrero Grande, en La Cabaña y en la casona de la abuela en Aguilares) mantenían ese tono sepia en mi mente (el color llegó con las historias de juventud de mis padres).

Son capturas del pasado, imágenes inmóviles que resguardan abundantes historias.